Me moriré de ganas de decirte que
Ya es costumbre dormirme con la ultima foto que me enviaste. Dejo sin leer tus mensajes, cada noche, para que a la mañana siguiente sea lo primero que vea según me despierte. Me dedico a construir un muro de protección contra falsas esperanzas, para que tus sonrisas no me afecten, para que realmente no me importes, pero eres irresistible al tacto y me perforas en cada suspiro.
Aun así, me muero de ganas de decirte que me gustas y que mi autoengaño es una mera escusa para no matarme si algo sale mal, es esa constante lucha contra mi misma y mi afán por joderme la vida por los tíos.
Pero ojalá salga bien y pueda dedicarte menos versos que besos y miradas.
Aun así, me muero de ganas de decirte que me gustas y que mi autoengaño es una mera escusa para no matarme si algo sale mal, es esa constante lucha contra mi misma y mi afán por joderme la vida por los tíos.
Pero ojalá salga bien y pueda dedicarte menos versos que besos y miradas.
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