Superficiales.

Volver a oír esas palabras de ofensa en boca de otros me estremece y a su vez, me llena de impotencia. Son ofensas que aún llevan mi nombre escrito, me señalan provocando reavivar las heridas, que fueron sanadas a base de esfuerzo. Y es que, sí,  aún me duele revivir cada pasarte de mi vida, aquellas épocas en las que todo eran prejuicios y criticas.
Mirame, quizás no puedas apreciar el dolor que aferran estos ojos, pero creo que tendrías que comprender que no se debe juzgar a nadie por sus defectos. Escuchame, la ignorancia cegará la brutalidad de tus actos, si nunca llegaste a vivir una situación parecida. No tienes ni idea de hasta que punto una ofensa puede llegar a dañar a una persona(Fisica como Psiquicamente).
El paso del tiempo me ha enseñado a catalogar a las personas según sus actos, sus criterios y su forma de pensar. Porque...
...Hay lluvias que nunca terminan de mojar, hay corazones que arden pero las llamas no llegan a quemar, hay recuerdos que aprietan pero no consiguen asfixiar, hay lágrimas que se desbordan pero ya no aferran sentimientos.
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